El Peso Justo
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Cuando practicamos ejercicio físico con un objetivo en concreto, tratamos de que el tiempo que invertimos sea efectivo. Por ello, la ropa para adelgazar ha comenzado a ganar popularidad, de manera que con el mínimo esfuerzo posible consigamos los efectos deseados.
El sudor es el líquido segregado por las glándulas sudoríparas para regular la temperatura corporal que se expulsa a través de la piel. Estas prendas pretenden aumentar la sudoración para eliminar mayor cantidad de grasas pero, ¿es cierto que perdemos peso sudando más?
La ropa para adelgazar se fabrica con tejidos no transpirables con el fin de aumentar la sudoración y la transpiración. En concreto hablamos de materiales como el neopreno, la licra o la poliamida.
Cuando realizamos ejercicio sudamos, esto es un proceso natural evidente y es independiente de la ropa, de hecho, hay otras muchas variables que aumentan la sudoración, como el consumo de alcohol, la intensidad, el estilo de vida, el sexo, etc.
Entonces, ¿sirve realmente la ropa de sudoración para que bajemos de peso? Lo cierto es que perdemos peso al sudar, pero perdemos agua fundamentalmente, y al hidratarnos posteriormente lo recuperamos. Por tanto, es el ejercicio en sí mismo el que nos hace gastar energía y perder grasa.
A pesar de ello, podemos emplear estas prendas como un complemento si lo preferimos, pero nunca como método exclusivo para reducir la grasa corporal. También pueden llegar a ser útiles en momentos puntuales como el calentamiento, especialmente cuando hay un clima muy frío.
Puesto que la ropa de sudoración no es efectiva para perder peso y dificulta la transpiración natural de nuestro cuerpo para regular la temperatura corporal, usarla puede resultar contraproducente.
Su uso es cuestión de sensaciones, hay personas que tienen la impresión irreal de que es un método efectivo, ayudándoles a mantener la motivación, pero esto no es más que un efecto placebo.
La única forma de perder peso es la combinación de una nutrición adecuada con ejercicio físico diario.
Tras leer el post, podemos llegar a la conclusión de que, si queremos mejorar nuestros resultados, sudar más no nos ayudará, se deben tener en cuenta otros factores, ya que el sudor nos hace perder únicamente agua y minerales.
Como dicen los expertos, el hecho de sudar no produce aumento de gasto calórico, es decir, no adelgaza, por lo que vestirse con más capas de ropa o subir la temperatura externa no sirve para quemar tejido graso.
Así que, la próxima vez que escuches a alguien defender la ropa para adelgazar, podrás argumentar por qué no funciona. ¿Qué opinas de este método? ¡Deja tus comentarios y opinión sobre el tema!
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