El Peso Justo
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Ya sea por perder peso, mejorar la forma física o por adquirir hábitos de salud, la ingesta y consumo diario de calorías debe ser un factor a tener en cuenta. El ejercicio es importante para estar en forma y tener un índice de masa corporal saludable, pero también lo es llevar una vida natural. Es posible perder peso sin esfuerzo.
Aunque se conocen actividades o alimentos que potencian esa pérdida de las kcal de más, existen algunos factores y acciones muy básicas que pueden ayudar en esta labor. Son técnicas efectivas, que actúan sin la necesidad de hacer un esfuerzo considerable y teniendo en cuenta la falta de tiempo que a menudo existe en la sociedad.
Hay hábitos muy sencillos relativos a la comida que aumentan un gasto calórico diario. Por ejemplo, algunos expertos recomiendan beber dos vasos de agua antes de la comida, de forma que proporcionen sensación de saciedad y se coma con menos ansiedad. Eso reduce el consumo de kcal.
Comer con ansiedad perjudica gravemente el consumo de kcal diario. Lo aumenta exponencialmente. Acciones sencillas, como comer en platos más pequeños, masticar lento o comer delante de un espejo, ayudan a reducir peso. De esta forma, se es más consciente de lo que se ingiere, en cuánta cantidad y cómo se consume.
Así mismo, hay que tener en cuenta que en el acto de comer en sí mismo se quema ya el 10 % de la ingesta calórica de ese día. Por ejemplo, las proteínas queman alrededor de un 27 % de las calorías que contienen, ya que su digestión es más complicada.
Además del cuidado de los hábitos alimenticios, la postura física también influye en el gasto calórico que se realiza. En primer lugar, está demostrado que estar de pie consume más calorías que estar sentado, aunque no se haga ningún movimiento especial. Por ello, acciones tan sencillas como hablar por teléfono o esperar el autobús pueden proporcionar un extra en la quema diaria de calorías, realizando estas acciones de pie en lugar de sentado.
Sentarse con la espalda recta y mejorar la respiración, haciéndola más profunda e intensa, aumenta el ritmo metabólico. Por cada litro de oxígeno que se respira, se queman, aproximadamente, 5 kcal.
Existen muchos estudios sobre la quema de calorías cuando se duerme. Algunos de ellos apuntan hacia la acumulación de grasa al estar inactivos. Sin embargo, cuando el cuerpo duerme, debe seguir manteniendo activas las funciones vitales, por lo que necesita consumir energía.
De esta forma, algunos datos apuntan a que, durante las ocho horas de sueño que es recomendable dormir, se puede llegar a gastar entre 400-600 kcal.
Hay algunas actividades que requieren muy poco esfuerzo y que ayudan en este objetivo.
Un ejemplo de ello es el sencillo acto de caminar, que mucha gente realiza a diario. Supone un gasto calórico intenso sin necesidad de hacer grandes esfuerzos. A una velocidad muy moderada, de unos cuatro o cinco kilómetros por hora, se puede llegar a consumir 280 kcal en una única hora. A medida que se aumenta el ritmo, la quema de calorías también se incrementa.
Acciones tan básicas como subir por las escaleras en vez de por el ascensor y pequeñas caminatas, suponen un extra que puede llegar a dar excelentes resultados en poco tiempo. Si se añade alguna actividad física más significativa, como correr, los resultados llegan rápido.
Este repaso por cuatro hábitos y actividades básicas que aumentan, de forma natural, el gasto calórico diario, puede ser útil para quienes deseen dejar peso. ¿Es realmente posible perder peso sin hacer esfuerzo?
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