El Peso Justo
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Esta semana traemos uno de los retos que sin lugar a dudas marcará la mayor diferencia en nuestro propósito de perder peso y/o mejorar nuestra salud. El reto tiene una dificultad media-alta aunque como siempre, ésta dependerá de lo buenos que sean los hábitos de cada persona. ¿Estás list@ para descubrirlo?
Eliminar el “azúcar” de la dieta. Tanto azúcar de mesa como productos que lo contengan
Esta semana no nos hemos andado con rodeos, aquí tenemos nuestro nuevo reto, increiblemente útil para perder peso rápidamente y conseguir una salud de hierro.
Sabemos que para que nuestra dieta sea equilibrada es fundamental que los hidratos de carbono predominen por encima del resto de nutrientes (hasta un 60% de la ingesta calórica total), eso no quiere decir que cualquier tipo de carbohidrato sea adecuado para completar este porcentaje. Se debe apostar principalmente por los conocidos como “hidratos de carbono complejos o de absorción lenta”: Cereales integrales, legumbres, verduras ...
Hasta hace poco, las recomendaciones de los grandes organismos internacionales de la salud recomendaban que el azúcar no debería exceder el 10% de las calorías de la dieta diaria si se quiere mantener un buen estado de salud.
Ahora, la OMS recomienda que el consumo de azúcares libres se debería reducir incluso más, por debajo del 5% de la ingesta calórica total si queremos obtener unos importantes beneficios adicionales para nuestra salud.
Actualmente, en nuestro país el porcentaje de personas cuya dieta cumple estas recomendaciones es verdaderamente bajo y ¡ésto tiene que cambiar!
Me parece importante recordar que cuando hablamos de “azúcares que debemos evitar” no nos referimos a cualquier tipo de hidrato de carbono, sólo al azúcar de mesa y a los azúcares añadidos a los productos procesados, bollería, dulces, refrescos, zumos … Por tanto, esta recomendación NO incluyen los azúcares intrínsecos en las frutas y verduras frescas. Éstas pueden (¡y deben!) consumirse en abundancia.
Aunque parece un reto sencillo, está comprobado que resulta verdaderamente difícil erradicar por completo los azúcares de la dieta, pues viene incluido hasta en los alimentos menos esperados: Caldos, salchichas y carnes procesadas, tomate frito, ensaladas, productos infantiles, zumos comerciales, algunos cereales de desayuno …
Sin necesidad de llegar a esos límites hay algo claro, si queremos cuidar nuestra salud y sentirnos mejor, tanto por dentro como por fuera, es necesario moderar YA el consumo de azúcar en la dieta diaria.
Los beneficios no tardarán en aparecer. Seguramente antes de terminar la semana del reto empezaremos a sentirnos más enérgicos y de mejor humor ¡Te aseguro que vale la pena intentarlo!
Para terminar me gustaría preguntaros qué tal ha ido el Reto Justo de la semana 8. ¿Lo habéis cumplido todos con éxito? ¡Esperamos vuestros comentarios!
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