Meditación para perder peso

Perder unos kilos, cuidar la línea o, simplemente, mantenerse en un peso saludable, es el objetivo que tenemos muchos. Por desgracia, no siempre tenemos la disciplina suficiente para ir con regularidad a un gimnasio, o tal vez el hambre nos impide acabar consiguiendo buenos resultados. Por otro lado, algunas dietas pueden ser demasiado exigentes, y no siempre serán suficientes. Lo que mucha gente no sabe es que podemos recurrir a la meditación para perder peso. Esta práctica, que en los últimos años está experimentado un verdadero boom, no solo es una forma estupenda de cultivar la mente y de acabar con los nervios y el estrés: meditar también nos puede ayudar a adelgazar.

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Beneficios de la meditación

La meditación puede tener efectos prácticos a la hora de perder peso. Estudios científicos han demostrado que practicarla nos ayuda a ser más conscientes de lo que ocurre en nuestro interior y actuar en consecuencia. Esto, a su vez, nos permite percibir de forma más eficiente nuestra sensación de hambre y de saciedad. Es decir, que no solo contribuye a calmar la mente, sino que también nos puede ayudar a regular la cantidad de comida que ingerimos a lo largo del día.

Está demostrado que el estrés es uno de los principales motivos que nos impulsan a comer, en especial alimentos que no son sanos. Muchas veces solo consumimos de forma compulsiva con el objetivo inconsciente de sentirnos mejor a nivel emocional.

Otro de los efectos que tiene la meditación sobre nuestro cuerpo es el de reducir los niveles de cortisol, una hormona directamente asociada con el estrés que puede provocar la producción de grasa abdominal.

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Cómo empezar a meditar

Meditar significa llegar a un estado mental en el que todo fluye. La atención se centra en el ahora, tanto fuera como dentro de nosotros. Para alcanzar dicho estado, existen diversos caminos y consejos que nos ponen al alcance tal objetivo.

Antes de nada, tendremos que encontrar un lugar adecuado y tiempo suficiente. En esta práctica, la clave es la constancia, y con unos 15 minutos al día debería ser suficiente. Necesitaremos un espacio tranquilo donde nadie nos vaya a molestar, ya sea el salón de casa, una habitación o cualquier otro sitio. Es importante dedicarnos un ratito al día que sea solo para nosotros.

Lo siguiente que tendremos que hacer es adoptar una postura cómoda y erguida. No es necesario cruzar las piernas. Solo nos sentaremos en una silla de forma confortable; así nos despreocuparemos de nuestro cuerpo. Además, antes de empezar, deberemos dedicar unos cuantos minutos a relajarnos. Si el cuerpo está tenso, eso se traducirá en pequeñas incomodidades que no nos permitirán meditar. Para liberarnos, podemos respirar profundamente durante unos minutos o recurrir a las prácticas propias del yoga.

En último lugar, solo nos queda empezar a meditar. Existen muchos audios que nos pueden servir de guía, tanto en Internet como en aplicaciones especializadas.

Lo fundamental es evitar tener demasiadas expectativas sobre lo que es meditar bien o mal. Lo único que importa, como ya hemos dicho, es la constancia. Hay que practicar cada día y tratar de poner interés para que nos resulte lo más beneficiosa posible.

Mantener la mente sana para una vida equilibrada

Practicar la meditación para perder peso está al alcance de todo el mundo. No se necesita gastar dinero ni invertir mucho tiempo, y con solo unos minutos al día se podrán comprobar los resultados. Eso sí, es aconsejable compaginar la actividad con algo de ejercicio y con una alimentación saludable. Y tú, ¿te animas a comprobarlo? Cuéntanos tu experiencia y tus rutinas en los comentarios. 👇🏻