¿Sabrías identificar una "dieta milagro"?

¡Es imposible saber de todo! Puedes tener tres carreras, dominar cinco idiomas, trabajar en la NASA y que, al no tener ni idea de nutrición, tengas que depositar tu confianza en alguien para planificar tu dieta o buscar soluciones en Internet.

En ocasiones, el asesor elegido es posible que tampoco tenga ni idea, pero le hayan dado un tríptico para que se aprenda de memoria y te suelte "el rollo" que a la empresa le interesa.

En otros casos (mucho menos comunes), daremos con alguien que de verdad ha estudiado para ello y tiene los conocimientos necesarios, pero quiere asegurarse de que cumplas tus objetivos rápido y a cualquier precio, con tal de que le pagues, te quedes contento (hasta que aparezca el efecto rebote y vuelvas a necesitar de sus servicios) y así pasar rápido a cobrar las tasas del siguiente cliente.

Es fácil que nos engañen en aspectos que no dominamos y que las palabras de aquellos "que entienden" ganen para nosotros el rango de verdad absoluta e incuestionable, asi qué ¿Qué podemos hacer para identificar cuando nos encontramos ante una dieta milagrosa, cuyas consecuencias ya conocemos más que de sobra?

Existen una serie de características que suelen cumplir este tipo de dietas y que detallamos a continuación, ahora ¡cuidado!, no por cumplir una de estas afirmaciones una dieta debe catalogarse directamente en el grupo de dietas milagro, pero sí deberíamos mirarla con recelo e incluso acudir a otro profesional de la nutrición y enseñársela, en busca de una segunda opinión si no acaba de convencernos.

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1. Promete conseguir resultados rápidos y muy bonitos para ser ciertos

“Haz como yo y pierde 20 kilos en 2 semanas” “Descubre el secreto de las celebrities para perder 87 kilos en un mes” “Consumiendo este producto en ayunas además de perder peso, conseguirás una piel tersa y sedosa”
Estoy segura de que os resultan familiares frases con estructuras similares. Si quieres perder peso de forma segura y definitiva, olvídate de las prisas.

Ésta es una de las señales más claras de que te encuentras frente a una dieta milagro, cuando te aseguran grandes resultados en un espacio corto de tiempo.

Cada persona es un mundo y para poder hacer este tipo de afirmaciones, o nos encontramos frente a una aberración nutricional acompañado de su efecto rebote, o directamente es todo mentira.

2. Advierten del peligro de consumir algún producto o alimento sin ningún tipo de fundamento, o de las consecuencias de no seguir el régimen propuesto al 100%

En una dieta equilibrada deberían aparecer todos los tipos de alimentos, principalmente aquellos naturales.

Cuidado con este punto. Según las restricciones de una dieta, podemos clasificarla en:

- Dietas equilibradas con restricciones justificadas

“Evitar salsas, fritos, bollería industrial, azúcar...” ¡De acuerdo!, queremos perder peso y el consumo de este tipo de productos no nos ayuda para nada a conseguir nuestro objetivo. Una dieta con este tipo de restricciones podrá ser perfectamente equilibrada, saludable y apta para perder peso.

- Dietas equilibradas con restricciones sin sentido

Deberíamos cuestionarle a la persona encargada de planificar nuestra dieta en qué se basa para no dejarnos consumir un determinado producto, aun así ésto no condiciona que necesariamente vaya a ser un desastre de dieta.

Por ejemplo: El otro día escuché a una chica comentándole a su amiga que había acudido por primera vez a un dietista el día antes porque quería perder peso y que no sabía que hacer con los yogures desnatados 0% de fresa que había comprado, porque le habían prohibido terminantemente los yogures de sabores, y sólo podía consumirlos naturales desnatados. No podéis imaginar con qué ganas me quedé de preguntarle si le había dado alguna explicación.

Al llegar a casa no pude evitar buscar composiciones nutricionales e ingredientes de distintos yogures. Como podréis imaginar, los ingredientes no son los mismos, pero los perfiles nutricionales en muchos casos eran casi idénticos. Entonces, si esta chica solo quiere perder peso, que alguien me explique por qué va a tirar a la basura un pack recién comprado de yogures de fresa.

Es una tontería, pero me llamó mucho la atención. (Nota: Sé que está mal escuchar conversaciones ajenas, pero siempre que escucho la palabra "dietista" soy incapaz de no "poner la antena")

- Dietas Milagro, desequilibradas y sin sentido:

“Come toda la grasa y proteína que quieras, como si quieres vivir únicamente de longaniza, eso sí, los hidratos ni tocarlos” “Aliméntate exclusivamente de batidos de frutas” … ¡por favor!

3. Dan explicaciones muy simples sobre temas complejos

Son capaces de hacerte "entender" en dos lineas (supuestos) conceptos avanzados de nutrición o metabolismo, y piensas: ¿Cómo no se me había ocurrido antes? ¡Es muy lógico!

Si no tienes ni idea de estos temas y en algún momento piensas ésto, ¡sospecha!

4. Ofrecen recomendaciones basadas en un único estudio (y a veces, ni eso)

Además, muchas veces este supuesto estudio contradice el conocimiento científico y las recomendaciones sanitarias de importante reputación.

Sospecha más aún cuando la Universidad en la que se ha llevado a cabo este "estudio" quede en la otra punta del planeta y al intentar buscar más información sobre él no encuentres nada fuera de la página que promociona dicha dieta.

5. Propuestas dietéticas con listas de alimentos “buenos” y “malos”

Como muy bien decía una de mis profesoras, "en el mundo de la nutrición, por desgracia, si quieres tener éxito tienes que inventar algo, sea lo que sea".

Inventar una lista de alimentos que favorecen la acumulación de grasa abdominal, o una de alimentos que si se consumen juntos modifican la producción de hormonas.

No os dejéis engañar, hay que consumir de todo, lo que se deben controlar son las cantidades.

6. Dietas planificadas de forma que sea obligatorio comprar un producto determinado que, casualmente, comercializa quien propone la dieta.

Es fácil imaginar que hay un negocio detrás ¿verdad?. La gente cada día es más difícil de engañar en este aspecto, pero siguen siendo muchos los que se dejan importantes cantidades de dinero en "productos estrella" o en complementos totalmente innecesarios o que podríamos obtener mediante el consumo de algunos alimentos de forma mucho más económica y natural.

7. No es una dieta personalizada

No tiene ningún sentido que se utilice una misma dieta para una adolescente deportista, un adulto de 2 metros y 120 kg y una abuelita encamada de 90 años.

Cada persona según su sexo, edad, talla, peso, actividad física… tiene unas necesidades nutricionales diferentes y ésto debe ser considerado también a la hora de planificar una dieta de adelgazamiento, ya que a parte de dichas necesidades, tampoco puede ser igual una dieta para alguien que quiere perder 3 kg de cara al verano, que para quien le sobran 120.

Por tanto, no aceptes empezar una dieta en la que no se te hayan hecho un montón de preguntas antes de planificarla.

Es otra de las característica esenciales de las dietas milagro, suele existir una para todos.

Normalmente una “dieta milagro” cumple tranquilamente con cuatro de estas características, aunque el hecho de que cumpla una de ellas ya puede ser causa de ponerla en cuarentena.

¿Te ha recordado a alguna dieta que han seguido? No dejes que jueguen con tu salud y tu alimentación.