Potaje de cuaresma: ¿sabes que las espinacas te hacen mas fuerte?

No todos los platos de Semana Santa tienen por qué ser calóricos. Es más, preparados de la forma adecuada, pueden llegar a ser una opción muy saludable y más en estas fechas que buscamos compensar los excesos y comenzar a ponernos a tono para el verano. Uno de estos platos es el potaje de vigilia, que como su nombre indica, viene de la época de vigilia, en la que se dictaba la prohibición de comer carne durante la Cuaresma.

Y ¿por qué es saludable el potaje de vigilia?

Las espinacas están presentes

En el potaje de vigilia las espinacas son uno de los principales ingredientes. Esta verdura es una bomba de propiedades saludables. Contiene betacaroteno, un antioxidante que ayuda a prevenir la ceguera y las cataratas. Además contiene vitamina A que ayuda a fortalecer el sistema inmunológico lo que ayuda aprevenir infecciones.

Además, se ha demostrado que las espinacas contienen cierta cantidad de esteroides, quizá el por qué Popeye las consumía. Estos esteroides influyen directamente en el crecimiento y desarrollo de los músculos, lo que ayuda a combatir el exceso de grasa en el cuerpo y a tonificar el mismo. Aunque tampoco está demostrada qué cantidad debemos consumir para obtener la cantidad necesaria de esteroides, está claro que es una ayuda natural.

También posee vitamina K que ayuda a fortalecer los huesos, y ácido fólico que contribuye a reducir la hipertensión.  

Receta saludable de potaje de vigilia

Este plato es un plato muy completo y saciante para compensar los excesos de esta semana. Puede consistir perfectamente en el plato principal de una comida y te sentirás satisfecha y con energía para toda la tarde.

Ingredientes

Para preparar nuestro potaje de vigilia saludable, necesitaremos los siguientes ingredientes:

• 300g de garbanzos secos
• 300g de espinacas frescas o congeladas
• 2 huevos
• 1 cebolla
• 5 dientes de ajo
• 1 hoja de laurel
• 1 cucharadita de pimentón dulce
• 2 clavos de olor
• Media cucharadita de comino en polvo
• Aceite y sal

Procedimiento

El primer paso para elaborar este potaje es dejar en remojo los garbanzos durante al menos 12 horas. Tras ello, podemos cocinarlos durante una hora y media a fuego lento en una cazuela o utilizar la olla express en la que tan solo en 20 minutos los tendremos listos. Sea cual sea la que decidas, optamos por echar un litro de agua, 2 dientes de ajo, las hojas de laurel y por supuesto, los garbanzos.

Después lo colocamos al fuego el tiempo necesario. Mientras tanto, podemos preparar el sofrito. Este consistirá en picar dos dientes de ajo y las cebollas. A continuación, en una sartén agregamos el ajo con aceite de oliva y cuando se dore retiramos. Después agregamos la cebolla hasta que se poche. Añadimos entonces el pimentón y reservamos. 

Por otro lado en un pequeño cazo cocemos el huevo, lo pelamos, cortamos y reservamos para después.

Una vez ha finalizado el tiempo de cocción de los garbanzos, pasamos el caldo junto a los garbanzos en otra cazuela (retirando el ajo y el laurel). Sobre esta cazuela vertemos el sofrito y colocamos a fuego medio. El siguiente paso es agregar las espinacas, la sal y el bacalao en trozos. Después de unos minutos bajamos a bajo fuego y en 5 minutos podemos considerar por finalizado nuestro potaje.

Para la presentación final agregaremos el huevo en trozos y ya podemos disfrutar de nuestro potaje de vigilia saludable.

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