El Peso Justo
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Son muchas las personas interesadas en pasar de una alimentación omnívora a vegana. El veganismo no es simplemente una dieta que rechaza el consumo de productos de origen animal, sino una filosofía de vida en sintonía con el medio ambiente. Mientras, la alimentación omnívora acepta los alimentos de cualquier procedencia.
Al principio, adoptar una dieta vegana puede parecer una misión imposible, así que para hacer el proceso más sencillo lo primero y más importante es marcarse pequeños objetivos y, sobre todo, debes tener muy claro por qué lo haces. Recuerda que hacerte vegano no es una carrera. Desde que comienzas hasta que alcanzas la meta el camino puede ser largo, y tienes que tomártelo con calma. De lo que se trata es de que vayas incorporando hábitos saludables de forma progresiva, eliminando gradualmente los alimentos de origen animal, así como los ultraprocesados.
Qué son los alimentos ultraprocesados y por qué evitarlos
Hay personas que deciden hacerse veganas, y de un día para otro dejan de comer carne, huevos y leche. A veces funciona, pero no es la opción más recomendable. El cambio debe ser gradual, y no te preocupes por tomarte el tiempo que necesites. Puedes empezar por reemplazar la leche de vaca por leche vegetal. Luego elimina la carne roja de tu dieta, a continuación los huevos... Dando pequeños pasos conseguirás mejores resultados, y más duraderos.
A la hora de ir a hacer la compra, olvídate de los ultraprocesados y apuesta por la 'comida real'. Puedes aprender qué es el realfooding y por qué merece tanto la pena. Si tu alimentación se basa en comida saludable, tu salud física y mental mejorará. Para llevar una dieta equilibrada debes comer todo tipo de alimentos de origen vegetal: cereales, legumbres, frutos secos, verduras, hortalizas, frutas...
Mantén en todo momento una actitud positiva ante el cambio, pensando en incluir en el plan de alimentación y no en restringir. Cada vez son más las personas veganas, de forma que la variedad de productos que puedes encontrar en el mercado es prácticamente ilimitada. Por ejemplo, la heura o el seitán son excelentes sustitutos de la carne, y no tienen nada que envidiarle en sabor y textura.
Lo más importante a la hora de seguir un plan de alimentación es que el organismo reciba los nutrientes que necesita para funcionar correctamente. En tu camino hacia el veganismo debes prestar especial atención a la vitamina B12, presente en los productos de origen animal y responsable de múltiples funciones, como la síntesis de ADN y la producción de glóbulos rojos. Lo ideal es que tomes la vitamina B12 como suplemento, siempre bajo la supervisión de un médico o un nutricionista.
También debes estar muy atento a la vitamina D, que ayuda al organismo a absorber el calcio. Aunque esta vitamina se toma principalmente del sol, algunos alimentos también la contienen, como los huevos o el pescado. Por suerte, hay alimentos enriquecidos con vitamina D, como la leche de soja. Y, por último, el hierro. El problema es que el organismo absorbe peor el de origen vegetal que el de origen animal. Lo más aconsejable es seguir una dieta bien organizada para ingerir una amplia variedad de alimentos ricos en hierro.
El camino para pasar de una alimentación omnívora a vegana es largo, aunque si estás motivado y tienes claros tus objetivos todo es mucho más sencillo. Podrás incluir una gran variedad de productos saludables y muy gratos al paladar. ¿Te animas a dejar de lado los alimentos de origen animal? Entra a nuestra página para comentarnos tus experiencias con esta nueva forma de alimentarte.
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