El Peso Justo
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Los smoothies se han convertido en una de las bebidas preferidas por aquellos que cuidan su salud y su figura. Se elaboran combinando principalmente frutas y vegetales, por lo que tienen un alto contenido nutritivo. Mantienen todo su contenido en fibra. Son fáciles de digerir y sus nutrientes son rápidamente asimilados por el organismo.
Son una increíble fuente de antioxidantes que aportan grandes beneficios para la piel, la vista, los huesos y el sistema inmunológico. También son bebidas energéticas, debido a su alta carga de vitaminas y minerales.
La mejor opción es utilizar frutas y vegetales de temporada, buscando que tengan sabores compatibles entre ellos. Para asegurarnos de que sea refrescante podríamos congelar las piezas de fruta troceadas, especialmente si te gusta alguna fruta que no se encuentra durante todo el año.
También se elaboran smoothies más completos o Deluxe que combinan más ingredientes. Además de frutas y vegetales se le añaden grasas naturales, superalimentos, plantas aromáticas, raíces, especias, etc.
Sin embargo, hay que tener mucho cuidado con los ingredientes que utilizamos en su elaboración. Aunque los componentes se licuan y mezclan, es importante tener presente la cantidad de grasa y calorías que contienen cada uno de ellos.
Hay ingredientes que no deberíamos incluir en nuestros smoothies, ya que solo aportan calorías vacías. Estos son algunos de ellos:
El chocolate, aunque con propiedades antioxidantes, también tiene un alto contenido de calorías y grasas, especialmente en sus versiones mezcladas con leche. Si aun así deseas añadirlo, mejor opta por chocolate negro.
Aunque la miel es natural y tiene increíbles propiedades para la salud, lo cierto es que cada cucharada contiene alrededor de 65 calorías. Las frutas ya contienen azúcar natural, no hace falta endulzar más tu smoothie. Utiliza frutas más dulces como plátano, frambruesas, piña o fresas.
Es cierto que la mantequilla de cacahuete, castañas o almendras le aportan un sabor especial a los smoothies, además de todas las proteínas y nutrientes que contienen. Sin embargo, también aportan un nivel alto de calorías que no te ayudarán a lograr tus objetivos.
Si quieres darle un toque lácteo a tu smoothie, le puedes añadir yogurt. Pero es importante que siempre elijas uno bajo en grasas y azúcares. También se le puede añadir leche, pero es mejor que utilices una de origen vegetal sin azúcar como la leche de almendras o de avena.
Recuerda que la fruta ya contiene azúcar, no hace falta añadir más ingredientes para endulzar. Aunque optes por opciones más saludables como miel o el sirope de agave, siempre estarás aportando más azúcar y calorías.
Los zumos industriales generalmente tienen un alto contenido en azúcares y calorías, además de otros componentes artificiales.
Si quieres que tu smoothie quede bien espeso, utiliza frutas que tengan una pulpa más densa como el melocotón o el albaricoque. Evita utilizar espesantes químicos que no aportan nada saludables a nuestro organismo.
Recuerda siempre utilizar ingredientes naturales. Además, no mezcles más de dos o tres porciones de fruta y añade un contenido alto de agua. Así facilitarás la digestión.
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